Cuando miles de niños ya disfrutan o están próximos a salir de vacaciones de invierno, los adultos enfrentan el desafío de apoyar esta etapa de descanso, pero al mismo tiempo generando momentos y actividades que estimulen su desarrollo. Especialmente, si son niños que asisten a la Educación Parvularia y están en una etapa crucial de sus vidas.
“Durante el período de descanso invernal, es importante que los niños y niñas puedan compartir con sus familias y su entorno de manera lúdica”, asegura la subsecretaria de Educación Parvularia, María José Castro. Para lograrlo, agrega que no son necesarios viajes largos o costosos, pues “a través de actividades sencillas, podemos generar experiencias significativas, que nos permitirán potenciar su desarrollo”.
Para facilitarle la tarea a las familias, la subsecretaría de Educación Parvularia elaboró una serie de consejos para compartir junto a los niños y disfrutar de este período significativamente.
A continuación, algunas recomendaciones:
• Las vacaciones de invierno representan una instancia en donde los niños y niñas, pueden estar en casa y disfrutar de actividades que les gusten, como jugar, pintar, armar figuras con bloques, entre otros. No es necesario programar salidas o actividades especiales para ellos, pues lo importante es compartir en el hogar y con su entorno.
• Durante las vacaciones, pueden flexibilizarse ciertas actividades, como por ejemplo despertarse o acostarse más tarde; cuidando que se mantengan ciertas rutinas básicas como alimentación saludable, lavado de dientes, entre otros.
• Si bien estamos en invierno, no abrigue demasiado a los niños y niñas ni los exponga a cambios bruscos de temperatura. El invierno, con los resguardos necesarios, no debe ser sinónimo de encierro, sino que una oportunidad de experiencias significativas y juegos.
• Si programa actividades, privilegie que éstas sean sin costo. Durante el descanso invernal, existen diversas ofertas de los municipios y centros culturales para niños y niñas. Aproveche de ir con ellos a conocer espacios culturales como bibliotecas, museos y otros lugares significativos de la comunidad o comuna. En estos espacios, escúchelos y genere diálogos en los que podrá conocer lo que los niños sienten, quieren, desean, piensan y creen. Escuchar sus opiniones, los hace sentirse importante y desarrolla su autoestima.
• Los niños y niñas se entretienen observando, explorando y manipulando distintos tipos de objetos y no requieren, por tanto, juguetes o elementos costosos. Por ejemplo, se pueden utilizar botellas de plástico vacías, tapas, cajas de distintos tamaños, conos de cartón, para jugar espontáneamente.
• Si pueden, visiten parques y áreas verdes. El contacto con la naturaleza permite desarrollar distintas habilidades en los niños y niñas. En estos paseos, promueva el disfrute y goce por la naturaleza. Asimismo, es posible establecer conversaciones respecto a las características del entorno natural y su cuidado.
• Si el clima lo permite, haga un picnic en familia, organizando en conjunto lo que necesitarán. Hagan una lista y chequéenla revisando que se encuentre todo. Este espacio permite desarrollar habilidades de organización, anticipación, coordinación y valores como la cooperación, entre otros.
• En todos los espacios mencionados, “descubra” con los niños y niñas las distintas señaléticas, letreros, imágenes y enséñeles a descubrir sus significados y respetarlos.
• Si tiene la posibilidad de compartir con otros niños y niñas, es importante promover constantemente la empatía, acogida, solidaridad, colaboración, respeto de turnos y fraternidad.
• Aproveche los distintos elementos que haya disponibles para compartir y disfrutar en familia. Por ejemplo: jueguen a reconocer los sabores de distintos alimentos con los ojos tapados, decoren los platos de comida con creatividad e ingredientes de diversos colores, pueden ordenar su dormitorio, reciclar juguetes, ver una película, ayudar en el regado de plantas o cuidado del patio, entre otros.















